Y USTED, ¿ESTÁ COLAPSADO?
Estoy superado.
Está bien. Yo entiendo que cuando uno trabaja en algo que le gusta, donde además se siente contento, no tendría de qué quejarse.
Pero la tele me tiene medio colapsado. Ya. Es entrete, hago lo que me gusta y el equipo de Alfombra es una verdadera familia. Pero necesito urgente tener vida. Pero mi vida de verdad.
El asunto es que mi verdadera vida sólo la vivo dos días a la semana. En mi casa. En Valparaíso. Con mi gente. Rabiando con mi vieja y riéndonos al mismo tiempo. Haciéndole cariño a mi abuela y tocándole la frente al peluche que pusimos en la cama de mi tata (que se parece harto a él). Pero el fin de semana. Sólo el puto fin de semana.
Me siento solo. Amo ser notero de “Alfombra Roja”. Pero ya no aguanto toda la semana en Santiago, hacer un turno de fin de semana como el que recién pasó y hoy, cuando sólo quería volver temprano a mis tierras, tener que seguir trabajando. Es injusto.
Ok. Hay que justificar las lucas. Pero todos tenemos derecho a tener un fin de semana como la gente. Y, a diferencia de la mayoría de mis compañeros de trabajo, para mi el fin de semana es mi vida de verdad.
Estoy chato. Cansado. Realizado, pero cansado. Y cuando no se tiene calidad de vida ni el mejor trabajo, ni el mejor sueño, ni el mejor cheque a fin de mes valen el esfuerzo.
Sorry aspiraciones. Really sorry futuro. I’m sorry jefes. Pero mientras ustedes llegan a sus casas cada día a ver a los suyos, como lo merecen y lo necesitan, yo llegó a ver tele y una foto de los míos en mi velador.
“¿No queriai trabajar en la tele?”
- Sí, pero así no.